A horas de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos París 2024, la empresa nacional francesa de ferrocarriles (SNCF) denunció un ataque masivo que prácticamente paralizó su red de trenes de alta velocidad (TGV) y que afecta a tres de las cuatro líneas de la capital francesa. El ministro saliente del Interior, Gérald Darmanin, llevó tranquilidad y aseguró que ningún deportista se vio afectado.
Darmanin aseguró que los actos fueron de origen humano y que no tuvieron consecuencias directas en la organización de los Juegos Olímpicos como así tampoco en la ceremonia de apertura.
Además, aseguró en charla con BFMTV que los atletas no se han visto afectados por lo ocurrido y que estarán en la ceremonia. O su tren está en marcha o hemos encontrado medios alternativos. Por último, reveló: Para la ceremonia, además de los militares, asistieron más de 50.000 agentes del orden.
Con el mismo sentido David Lappartient, presidente del Comité Nacional Olímpico y Deportivo de Francia, aseguró que el sabotaje no repercutió en los deportistas. Ya han llegado muchos atletas, que yo sepa (no hay) atletas bloqueados por esto. La delegación no se ve afectada, dijo el dirigente según compartió Le Monde.