El rey emérito de España Juan Carlos I mantuvo un largo amorío con la vedette Bárbara Rey y hasta se habló de un pago de cuatro millones de euros por parte de la corona española para comprar su silencio. Este tema ha sido una incógnita por más de tres décadas. Ahora, una revista holandesa publicó por primera vez fotos del entonces jefe de la corona española con la exvedette en la terraza de su casa en Madrid a los besos.

Si bien el vínculo con el monarca había sido confirmado por múltiples autores que siguen la vida de los borbones, las postales aparecen a 30 años del affaire. Se trata de dos las imágenes borrosas -publicadas en la revista holandesa Privé- que muestran a Juan Carlos I y la exvedette en la terraza de su casa. Según publicó el medio español El Mundo, el hijo de la exactriz -Ángel Cristo Jr.- contó en un programa de televisión haber sido el responsable de las capturas. “Ese día con todo preparado les hago las fotos íntimas, que van desde el auto, a la barbacoa, a la piscina en actitud romántica”, contó.

También reveló que su madre le había dicho que el rey no era su amante, que había “sufrido mucho con él, mucha censura”, y que no había podido trabajar por estar con él. “[El rey Juan Carlos] se ha portado muy mal, [mi madre] ha tenido que empeñar las joyas y cuando le ha pedido dinero siempre ha sido a cambio de algo”, sumó Ángel Cristo Jr.

Treinta años después del hecho, la revista Privé difundió las imágenes que ningún medio español había publicado antes.

La revista alemana acompañó las fotos con un breve texto. “Con estas fotos, el rey Juan Carlos I fue chantajeado por una de sus muchas amantes, la estrella de televisión Bárbara Rey”, afirmaron, y aseguraron que en 1994, la mujer hizo que su hijo de entonces 13 años tomara las fotografías en silencio para luego sobornar al monarca. “Le hizo ganar mucho dinero y por venganza hacia su madre y para desmentir sus palabras, Ángel ha contado esta impactante historia”, precisaron.

La mujer, sumó la publicación, también lo habría chantajeado con grabaciones de cámaras y micrófonos que había instalado en su casa. Hasta se habló de un pago de 4 millones de euros para comprar su silencio y de la gestión de un programa televisivo dedicado a la cocina que le ofreció la televisión de Valencia por pedido expreso del Rey aun cuando la actriz, que hoy tiene 74 años y está retirada, no sabía cocinar ni hablaba valenciano.

Tras la difusión de las fotos, el medio Vanitatis habló con la exvedette. “Me he quedado con la boca abierta y triste. Nunca imaginé que fuera a hacerlas públicas y, peor aún, hacer uso de ellas”, dijo y añadió: “No tengo palabras. Entiendo que voy a hacer lo mismo que he hecho hasta ahora, utilizar la Justicia. Estas fotos son mías, pertenecen a mi privacidad. Quiero dejar claro que él [su hijo] nunca hizo esas fotos”.

También habló con el programa Espejo Público, de Antena 3. “No sabía que podía llegar hasta este extremo; qué vergüenza”, dijo sobre el paso que dio su hijo. “Con esto se demuestra quién es mi hijo, cómo es y cómo ha sido toda la vida”, añadió.

Conocedora del alto voltaje del reportaje gráfico, Privé lo presenta explicando que Bárbara Rey, “una popular estrella televisiva de los años 70 y 80”, tuvo problemas económicos. En aquel momento, “se vio obligada a utilizar el romance con Juan Carlos como medio para exigirle dinero”. Según la revista, el plan se complicó “cuando la inteligencia española se enteró del intento de chantaje”. Ángel Cristo Jr. describe en el texto que su familia vivía “bajo amenazas constantes” y que la rutina de sus vidas cambió.

La publicación de las imágenes coincidió con la estancia de Juan Carlos en España para participar en unas regatas en la localidad gallega de Sanxenxo. También ven la luz justo cuando este martes se anunció la próxima aparición de las memorias del rey emérito. Tituladas “Reconciliación”, Juan Carlos justificó su autobiografía. “Tengo la sensación de que me están robando mi historia”, dijo. Está previsto que el libro salga a la venta a principios del año próximo y en francés. La encargada es la editorial Stock, de grupo Hachette, según anunció la revista francesa Point de Vue.