Tras el atentado del sábado, el candidato a presidente de los Estados Unidos, Donald Trump reapareció con una venda en la oreja, este lunes en la convención republicana que se realizó en Milwaukee. Se mostró con el puño en alto, el mismo gesto con el que saludó a los presentes en el acto de Pensilvania luego del intento de magnicidio.
El exmandatario había anunciado su participación en el evento político a través de sus redes sociales. “No tendremos miedo”, aseguró en su cuenta de Truth Social.
Trump sufrió una herida en la oreja derecha durante un acto de campaña en Butler, Pensilvania y debió ser retirado con una fuerte custodia del escenario. Como consecuencia del ataque, una persona del público murió y otras dos debieron ser atendidos en grave estado. El tirador fue abatido por el Servicio Secreto.
“Gracias a todos por sus pensamientos y oraciones de ayer, ya que fue solo Dios quien evitó que sucediera lo impensable”, fue el primer mensaje del expresidente. Y agregó: “No tendremos miedo, sino que permaneceremos resilientes en nuestra fe y desafiantes ante la maldad”.
El atentado contra Donald Trump
Durante el acto en Pensilvania, se escucharon fuertes explosiones en el lugar y Trump cayó al suelo. Poco después los agentes lo ayudaron a ponerse de pie y allí se alcanzó a ver que tenía sangre en la cara. Le gritó a la multitud y levantó el puño para demostrar que estaba en buen estado.
Luego fue trasladado a un vehículo y evacuado del lugar hacia un centro de salud cercano. Richard Goldinger, fiscal del condado de Butler dio detalles de las dos personas que murieron durante el evento: el agresor y una persona que se encontraba en una de las gradas.
“Supe inmediatamente que algo andaba mal porque escuché un zumbido, disparos e inmediatamente sentí la bala atravesando la piel. Hubo mucho sangrado, entonces me di cuenta de lo que estaba pasando. ¡Dios bendiga a América!”, contó Trump en redes sociales.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) pudo identificar al tirador. El servicio de seguridad de los Estados Unidos confirmó que su nombre era Thomas Matthew Crooks y tenía 20 años. Además, estimó que el autor del ataque actuó solo y los primeros indicios no dan pistas de que pertenecen a alguna organización terrorista internacional.
“En este momento, la información que tenemos indica que el tirador actuó solo y que actualmente no hay preocupaciones de seguridad pública”, dijo en una teleconferencia Kevin P. Rojek, el agente del FBI a cargo de la investigación.
