Con la llegada del invierno surge la necesidad de mantener los hogares cálidos, con métodos clásicos, y otros no tan convencionales. En ocasiones puede llegar a ser todo un reto conseguirlo, sobre todo ante un elevado precio de los suministros que pueden hacer crecer notablemente las facturas de gas y luz.
A continuación, te dejamos los mejores consejos para mantener tu casa calefaccionada y resguardada de las bajas temperaturas que se aproximan, sin gastar de más y cuidando tu salud.
Cómo calentar la casa en invierno sin gastar plata
- Aprovecha la luz solar: mantener las cortinas abiertas durante el día para dejar entrar la luz solar y calentar naturalmente tu hogar.
- Aisla adecuadamente: asegurate de que tu casa esté bien aislada para evitar fugas de calor. Revisá las ventanas y puertas en busca de corrientes de aire y sella cualquier espacio.
- Optimiza el uso de la calefacción: programá tu calefacción para que la temperatura sea más baja cuando no estés en casa y más alta cuando estés.
- Usa alfombras y cortinas gruesas: colocá alfombras gruesas en los pisos y cortinas pesadas en las ventanas para ayudar a retener el calor.
- Sella chimeneas y conductos de aire: asegurate de que las chimeneas estén cerradas cuando no estén en uso y sella los conductos de aire.
- Utiliza mantas y capas adicionales: en lugar de aumentar la calefacción, considerá usar mantas y capas adicionales para mantenerte abrigado mientras estás en casa.
- Revisa y limpia los sistemas de calefacción: antes de que llegue el invierno, asegurate de revisar y limpiar los sistemas de calefacción, como radiadores y calderas, para garantizar un funcionamiento eficiente.
- Cocina estratégicamente: utilizá el horno y la estufa para cocinar durante el día para aprovechar el calor adicional que generan, pero asegurate de apagarlos cuando hayas terminado.