De vez en cuando está bueno salir de la rutina y hacer algo distinto para la merienda en familia, pareja o amigos. Por este motivo, las redes sociales se han encargado de difundir interesantes recetas que son reversiones de los clásicos de la panadería y se caracterizan por ser riquísimas, originales y que no pueden fallar.
Dentro de las opciones dulces que hay, los brownies de limón, también conocidos como “lemonies”, son una gran alternativa para tener en cuenta, ya que son fáciles de hacer, solo llevan 30 minutos, y cuentan con la dosis perfecta de frescura y acidez de la fruta que es acompañada con un cremoso glasé. Dadas estas características, son perfectos para acompañar un rico té, café y el infaltable mate amargo.
Ingredientes económicos
LA BASE PARA LOS BROWNIES DE LIMÓN:
- 100 gramos de manteca.
- 3/4 taza harina 0000.
- 2 huevos
- Ralladura de limón.
- 2 cucharadas jugo de limón
- 3/4 taza azúcar.
- 1/2 cucharadita sal.
PARA EL GLASEADO/DECORACIÓN:
- Agua.
- Jugo de limón.
- 1/2 taza azúcar impalpable.
- Ralladura de limón.
Una preparación sencilla que se hace en solo 30 minutos
- Para empezar, en un bowl amplio, mezclemos la taza de azúcar con la manteca, la cual debe estar a temperatura ambiente, la harina y la cucharadita de sal. Unimos todo hasta que se compacte en una masa tipo “arena”.
- Rallamos la cáscara de limón (la cantidad que vos quieras, pero tené en cuenta que si agregas más, el sabor será de mayor intensidad) y separamos la pulpa del jugo de limón. Agregamos el líquido del cítrico a la preparación anterior y humedecemos la totalidad de la base para que se impregnen bien los sabores.
- Rompemos los huevos en un recipiente más chico y batimos. Incorporamos en el bowl y mezclamos todo por unos 2 minutos a 5 minutos o hasta que la preparación quede suave y cremosa.
- En un recipiente, apto para cocción, que este previamente enmantecado y enharinado, ponemos la mezcla ya preparada y mandamos al horno a unos 180 grados por unos 20- 30 min máximo, pero tené en cuenta que el tiempo final dependerá del alto que le des al bizcochuelo.
- Mientras se hornea la preparación, rallamos la cáscara de medio limón y dividimos el jugo de la pulpa de la fruta. Colocamos ambos productos en un recipiente con el azúcar impalpable y un chorrito de agua tibia. Mezclamos todo hasta que quede una pasta de color blanco que tenga una consistencia firme, pero moldeable.
- Tras terminar la cocción del brownie, dejamos enfriar por unos minutos. Pasado el tiempo, decoramos con el glasé y rallamos un poco más de limón como decoración. Cortamos en cuadraditos y servimos con la infusión que más te guste.
