Aunque el invierno no es la estación más activa para la jardinería, es posible seguir cultivando ciertas plantas y hierbas aromáticas que soportan las bajas temperaturas. En este informe te presentaremos cuáles puedes plantar en medio de la ola de frío, junto con sus características y cuidados específicos.
Perejil: Una hierba robusta que puede soportar las heladas ligeras del invierno. Se adapta bien a las condiciones frías y puede crecer tanto en interiores como en exteriores. Para su cultivo, es esencial asegurarse de que reciba suficiente luz solar, al menos seis horas al día. El suelo debe ser bien drenado y mantenerse húmedo, pero no empapado.
Orégano: Es resistente y puede sobrevivir a las heladas moderadas. Prefiere suelos bien drenados y no requiere riegos excesivos. Además, es una planta que necesita mucha luz solar para desarrollarse correctamente, por lo que es ideal plantarla en un lugar donde reciba luz directa.
Menta: Conocida por su capacidad de crecer en diversas condiciones. Prefiere suelos húmedos y bien drenados. Puede cultivarse en macetas dentro de casa o en el jardín. Asegúrate de que reciba luz indirecta si se cultiva en interiores. Su capacidad de expansión rápida requiere control para evitar que invada otras áreas del jardín.
Romero: Una hierba que resiste especialmente en regiones con inviernos suaves. Requiere suelo bien drenado y no necesita riego frecuente, ya que es tolerante a la sequía. Debe estar expuesto a la luz solar directa durante varias horas al día. Además de su uso culinario, esta planta aporta un aroma agradable al jardín.
Salvia: Puede sobrevivir a las heladas ligeras y prosperar en invierno. Prefiere suelos bien drenados y no necesita riegos excesivos. Al igual que otras hierbas aromáticas, requiere luz solar directa para crecer vigorosamente. Es conocida por sus hojas aromáticas y sus usos medicinales.
Tomillo: Necesita suelos bien drenados y es muy tolerante a la sequía. Debe recibir al menos seis horas de luz solar al día para crecer adecuadamente. Esta hierba es excelente para condimentar alimentos y también tiene propiedades medicinales.
Lavanda: Conocida por su fragancia y sus flores violetas. Esta planta perenne es resistente al frío y puede cultivarse en invierno si se protege adecuadamente. Necesita un suelo bien drenado y exposición directa al sol. Además de su uso en aromaterapia, sus flores pueden utilizarse en diversas recetas culinarias.
Para asegurar el éxito del cultivo de hierbas aromáticas en invierno, es crucial proporcionarles suficiente luz natural, al menos seis horas al día. Utiliza suelos bien drenados para evitar el exceso de humedad y protege las plantas de heladas severas. Además, puedes utilizar macetas y trasladarlas al interior en caso de condiciones climáticas extremas.
