La entidad marcó que la realidad de los médicos de toda la provincia es "alarmante" y ante esto hizo un llamado a las autoridades de la Provincia a "tomar medidas efectivas". Pone la alarma en la caída de las especialidades, la fuga de profesionales y la caída en la calidad de atención a los pacientes. 

Los trabajadores y profesionales médicos de la provincia sostienen en todos los centros de salud, medidas de fuerza y estados de asamblea permanente, generando de esta manera nuevamente presión al Ejecutivo Provincial para que se genera en el sector, no un aumento, sino una recomposición salarial que vaya de la mano de los aumentos inflacionarios y los valores de la canasta básica. Protagonizan este pedido, en representación de todos los trabajadores y profesionales de la salud, los pediatras del Hospital de Niños “Eva Perón” y los profesionales de la Maternidad Provincial “25 de Mayo”. 

Los primeros amenazan con dar de bajas las guardias y los segundos, resolvieron tras la asamblea de este jueves, que se van a llamar a medidas de fuerza. Acusan que la realidad económica del sector es acuciante y para certificar esto, indican que “los propios índices de los propios organismos oficiales publican que tenemos más del 50% de la planta trabajadora siendo pobre”. 

Ante esto, el Colegio Médico de Catamarca apoyó a sus médicos, apuntando que lo que acontece en la salud pública de la provincia afecta no solo a los profesionales, sino que repercute en la calidad de la atención de los pacientes. Es por ello por lo que, mediante comunicado expresaron “su profundo repudio ante la situación laboral y remunerativa de los médicos de la provincia, la cual está alcanzando su punto más crítico. Afecta ya a todas las especialidades y a todo el espectro de atención médica”. 

Luego de recordar el conflicto pasado y el poco avance y soluciones que se brindaron, la entidad resalta ahora que “la falta de actualización salarial, tanto en el ámbito público como privado, así como la ausencia de reconocimiento en los honorarios de las obras sociales y prepagas, nos sitúa en una posición de olvido y castigo. Mientras celebramos los acuerdos paritarios de otros gremios, que superan los índices inflacionarios, nosotros recibimos aumentos mínimos y discrecionales por parte de los financiadores de la salud. El desánimo y la frustración invaden a nuestros médicos y el éxodo de profesionales es incesante. Ya son muchas las Especialidades en riesgo inminente”. 

El Colegio alerta, que a su parecer esta crisis de la salud pública, sobre todo, está impactando en la calidad de atención de los pacientes, marcando que lo que acontece es “una realidad más que alarmante”. Y para evidenciar esto agregan en el comunicado: “Pronto nos quedaremos sin médicos, aun en especialidades imprescindibles y pilares como la Pediatría o la Clínica Médica entre tantas más. Con los valores vigentes de remuneraciones públicas o privadas es casi imposible radicar o convencer de permanecer en nuestro suelo a jóvenes especialistas, quienes buscarán otros lugares para realizar sus actividades asistenciales”. 

Ante esto, la institución llama a las autoridades a “tomar medidas efectivas para reconocer y dignificar la labor de médicos, garantizando condiciones laborales y remunerativas justas que nos permitan seguir dando un servicio esencial y constitucional, como es el derecho a la salud”. 

En el final sentencian “no es aparatos o infraestructura, somos todos nosotros, el Recurso Humano y cada paciente. Convocamos a las Instituciones médicas con objetivos comunes, para que se sumen. A las sociedades científicas a participar activamente para generar estrategias de diálogo y cambio a esta alarmante realidad”.