Se repite el hecho de personas en situación de calle y la falta de una respuesta que contenga estas realidades. Ahora y tras lo sucedido hace unas semanas, también en el Complejo de Valle Chico, el SAE-911 advirtió que en Calle N*8, entre calle N*31 y calle N*33 de dicho complejo habitacional en una vivienda del IPV en construcción, se estaría produciendo una usurpación. 

Al constatarse el hecho, se conoció que dos mujeres, una de ellas Sofía Yasmín Sampayo, de 22 años, se encontraba en el interior de la casa junto a sus dos hijos de 2 años y otro de 2 meses. Ella estaba en compañía de una amiga identificada como Ayelén Daiana Reynoso de 24 años, quien a su vez lo hacía en compañía de su hijo de 5 años. Ante la requisitoria de los efectivos policiales que se dieron cita en el lugar, ambas manifestaron no tener donde vivir y que habían llegado el lugar a las 18 hs. 

Tras el diálogo, ambas aceptaron el pedido de retirarse voluntariamente, desalojando dicho espacio. Se desconoce dónde fueron a repararse con los menores, en una de las noches más frías de este invierno en la provincia. Solo se sabe que luego Claudio Luis Nieto de 48 años, guardia de la Empresa “Construcciones Civiles” luego procedió a cerrar todas aberturas y quedó como responsable de avisar cualquier novedad. 

Llama la atención que, tanto en este caso, como en el anterior, en el que unos jóvenes fueron encontrados bajo el puente de Valle Chico, y estando además una embarazada, las fuerzas de seguridad no tienen instrucción de dar aviso a algún organismo provincial o municipal, para que estas personas puedan ser contenidas. En el caso de este martes había menores y en el otro caso, una jovencita cursando una gestación de varios meses.