LA UNIÓN se acercó a Camila Carrizo, una madre catamarqueña y empleada informal que busca respuestas a sus reclamos: el primero es unos audífonos para su hijo Elías, de 6 años, y diagnosticado con hipoacusia hace dos años. Necesita los audífonos para poder comunicarse con su familia, y con respecto a esto, Camila cuenta con tristeza:

“Si él no escucha, no habla nada. Ayer fue su cumpleaños y estuvo triste, no quería hablar, y no le entendemos porque no habla.”

También añade que pagó todos los estudios para llegar a este diagnóstico, los cuales fueron caros, y actualmente tiene que hacer otro presupuesto para los audífonos para presentar a las autoridades; estos julio valían $680.000, Camila no sabe cuánto valen en la actualidad, pero le advirtieron que por la subida del dólar, es muy probable que ese monto sea mayor, y por supuesto, inaccesible para una trabajadora informal sin obra social.

Con respecto añadió que su pareja tampoco tiene obra social, y por esto se presentó en la Municipalidad para que le den una solución, en lo que se refiere a los audífonos, le dijeron que el miércoles iban a comunicarse con Nación para acceder a una obra social que le ofrezca una cobertura para estos:

“Me dijeron que iban a hacer el alta, no me van a entregar los audífonos, después tengo que pedirlos a la obra social.”

El segundo reclamos es por una vivienda, quienes la atendieron le dijeron que tenía que ir directamente con el IPV ´para solicitar el inmueble o la donación del terreno.

Las respuestas para ambos pedidos se la darán este miércoles.

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