Mientras el tiempo pasa y, ahora con el invierno que se hace sentir, el reclamo por una vivienda digna que sostiene desde hace medio año la familia de José Varela, sigue sin tener una respuesta concreta. A pesar de la visibilización del caso y lo dramático del cuadro, sobre todo por las incomodidades que pasan dos menores y una jovencita discapacitada, los tiempos de la burocracia van por otro lado. Es más, ni siquiera los dejaron permanecer frente a Casa de Gobierno. Este miércoles a última hora fueron corridos del lugar y regresaron al Camping Municipal.
En el medio, la constante es la falta de respuesta. "Tenemos que seguir esperando", dijo José a La Unión, luego de salir de la sede gubernamental, otra vez con las manos vacías. Esto a pesar de las declaraciones sobre su situación que este jueves diera el ministro de Vivienda y Urbanización, Fidel Sáenz, quien en el marco del recorrido por las obras del Parque La Gruta 3, dijo que estaba al tanto del reclamo.
Lamentablemente esto no se traduce en una solución sino que por el contrario. Según el funcionario, habrá una solución pero no pudo precisar cuándo iba a ser esto. En el contacto con la prensa, en un primer momento dijo: "estamos al tanto de esa familia", para seguidamente referir "no podemos resolverle en este brevísimo espacio de tiempo el tema a esa familia. Una casa, lamentablemente necesita tiempo y hay una burocracia estatal que hay que cumplir y respetar, para poder resolver ese tema".
El punto es que el pedido de una vivienda digna de parte de la familia Varela no lleva los seis meses que llevan en el Camping Municipal, sino más de cinco años, que es el tiempo que refieren estar inscriptos en el IPV, con el adicional que por tener una hija discapacitada, se supone que los plazos deben ser distintos. Evidentemente esto no es así.
Se refiere esto, porque Sáenz al tratar de dar razones sobre la demanda de familias en situaciones límites, como es este caso, indicó que el organismo tiene un Observatorio de demanda habitacional y que es esta instancia la que analiza y lleva un registro de estos casos. Según el ministro esta dependencia "realiza un relevamiento de la demanda habitacional todo el tiempo. Sabemos cuántas viviendas debemos hacer y cuántas familias están en máxima precariedad". No obstante esto, el reclamos como el de los Varela, se dan todos los días.
Tras esto, que puede ser una excusa, el ministro seguidamente a pesar de haber referido los plazos "de la burocracia" dijo: "Lo que tiene que saber esta familia y estar seguros, es que detrás de su demanda, tiene un Gobierno que escucha".
Tras conocer estos dichos, José recordó que fueron "corridos de Casa de Gobierno" y que otra vez van a dormir en la precariedad del camping, porque las novedades siguen demorándose.